No me importa si el agresor de Mariano Rajoy era rico o fumaba porros

17 diciembre, 2015 María Moragues Alandete Comments Off

agresor mariano rajoyMe importa muy poco si el agresor de Mariano Rajoy era hijo de un abogado, iba a un cole de niños pijos y si fumaba porros o no. Lo que ha hecho El País (para mí uno de los mejores periódicos) con esta «noticia» es prensa rosa y no periodismo.

http://politica.elpais.com/politica/2015/12/17/actualidad/1450350896_519732.html?id_externo_rsoc=FB_CM

A mí lo que realmente me preocupa es esto: sus amigos le animaron a matarlo… ¿En qué sociedad vivimos? ¿Estamos construyendo una sociedad agresiva? Seguro que sí. Jóvenes que se matarían por sus ideales (ya sean políticos, sociales como deportivos) y además se enorgullecen… No saben qué es la democracia y tampoco el respeto, en algo estamos fallando.

Por otro lado, nadie se ha parado a pensar el calvario que estarán pasando sus padres. Tal vez nadie ha recapacitado y ha llegado a la conclusión de que los progenitores de este chico le han educado a respetar a las demás personas y él ha seguido por un camino diferente, con malas compañías o nefastas influencias. Pero es muy fácil echarle las culpas a sus padres. He leído numerosos comentarios que afirman: claro, como era un niño rico… lo llevan a un colegio de pijos para que hicieran con él lo que sus padres no han sabido. Señores y señoras, educar a un hijo es mucho más difícil de lo que se piensan. Hasta día de hoy no soy madre pero tengo sobrinos y comprendo perfectamente la dificultad que conlleva la educación y más en los tiempos que corren.

He mantenido conversaciones con mis padres sobre casos semejantes y más cercanos. En todo momento, ellos afirman que ningún progenitor (con dos dedos de frente) quiere educar mal a sus hijos, todo lo contrario, quieren que sean buenas personas. Tal vez, algunos se equivocan y no saben/pueden controlar todo aquello que hacen sus hijos. En ocasiones los padres se equivocaran, erraran en la educación de sus hijos… Pero no son los responsables de los malos hábitos o nefasto camino que han escogido sus hijos.

Así que señores, eduquen a sus hijos y fomenten la paz. Pero recuerden que cuando este joven cruce la puerta, el camino que tome no es su culpa, es una decisión propia.

Y por último, recordad que los amigos de este joven le animaron a “matar” al Presidente del Gobierno. Pues muy mal vamos…