Me quiero viva, nos quiero libres, os quiero seguras

26 abril, 2018 María Moragues Alandete Comments Off
JOSÉ JORDÁN
JOSÉ JORDÁN

Me quiero viva, nos quiero libres, os quiero seguras. Me niego a vivir con el miedo de ser atacada por un hombre. Me opongo rotundamente a ser súbdita de un macho por el simple hecho de ser mujer. Tampoco quiero ser vasallo de nadie.

Me enseñaron a ser autosuficiente, a no necesitar a un hombre para montar un armario ni para conectar un nuevo electrodoméstico. Soy válida para ello y lo demuestro cada día. También he aprendido durante estos 28 años que los «mejores» cocineros son hombres y la crianza es un proceso precioso que debe desarrollarlo el padre y la madre. Los roles de inferioridad y superioridad no se miden por la fuerza de un hombre o una mujer, sí por la educación que se posee y el respeto a los demás.

Sin embargo, hoy todo ello se ve truncado tras la lectura de una sentencia que considero injusta y poco ejemplar, desde mi ignorancia judicial. Nos queremos vivas por ello no atacamos a nuestros agresores. Pero debemos aguantar meses de culpabilidad social por salir a la calle de fiesta o volver a casa sola. Y que se cuestione si fue consentida o no esta violación.

Pretendéis hacernos débiles. Las leyes españolas buscan la superioridad del hombre y la opresión total de las mujeres. Las condenas no son ejemplares, se busca la reinserción social de violadores mientras no se preocupa de la salud mental de la víctima. 50.000 euros tienen la culpa. Este dinero será el que deberán pagar los integrantes de la Manada a la víctima. 50.000 euros que servirán seguramente para pagar los gastos psicológicos de la víctima.

Las leyes y sentencias de la Justicia Española no me representan. No son ejemplares y totalmente diferenciales. Abuso sexual: 9 años, cantar una canción contra el rey: 5 años. ¿Dónde está la diferencia? Que la mujer deberá vivir durante el resto de su vida con esta pesadilla y el rapero utilizó la libertad de expresión. Muy diferente ¿verdad?

Seré mujer toda mi vida y defenderé mis derechos y los de los hombres a partes iguales. No me siento ni me sentiré ni superior ni inferior a ellos. Pero juro que lucharé día tras día para no tener miedo a salir sola por la calle a las 12 de la noche, alzaré la voz para que cualquier mujer luzca una minifalda y no se sienta acosada por un hombre. Daré visibilidad a los casos machistas y retrógrados que cada día deben aguantar las mujeres.

Nos queda mucho por hacer. Endurecer las penas, enseñar la igualdad des del colegio. Dar voz a aquellas mujeres que por desgracia no la tienen.

Luchemos por nosotras, por ellos y también contra la crueldad. Seamos libres, sitiémonos vivas y seguras. Seamos las mujeres que queramos ser.